
En algunos sitios a estas alturas de año, ya entrados en el pleno verano, las larvas de los anfibios habrán completado su metamorfosis y habrán abandonado ya las charcas. En otras zonas más frías y por lo tanto más atrasadas, como es el caso de las zonas de montaña por donde me suelo mover, se pueden ver en estos días a varias especies sin haber completado todavía su metamorfosis y algunos ejemplares metamórficos en los alrededores de los puntos de agua donde han nacido y se han desarrollado. Además, este año tan lluvioso ha hecho que aun en pleno mes de Julio muchas charcas tengan bastante agua, lo que está siendo muy beneficioso para las especies que presentan un desarrollo más lento.
Dejo a continuación algunas fotos de los pequeños metamórficos plenamente desarrollados y otros que aún les quedan unos días, que me he ido encontrando en estas fechas en los distintos puntos de agua que he visitado para seguir su evolución.
Metamórfico de sapo de espuelas que todavía no ha perdido la cola. Sus hábitos son todavía acuáticos aunque se les puede o fuera del agua en las proximidades de los charcos donde están o la mayoría con la cabeza o las narinas por encima de la superficie del agua al ser su respiración ya pulmonar en gran medida. Son las larvas de esta especie de las más grandes de los anfibios.

Las ranitas de San Antonio después de haberse desarrollado completamente habiendo perdido la cola y presentado su aspecto final, son de un tamaño muy reducido, aproximadamente rondarán el centímetro de longitud. Se las puede ver en la vegetación circundante a la charca a cualquier hora del día.

